A propósito de los recientes artículos sobre Radiestesia Medica publicados por el ISSI y una de las posibles explicaciones que debiéramos debatir.
Por el Dr. Antonio Armas.
Cada superficie del espacio terrestre está sometida a las radiaciones de los astros que penetran en la atmósfera y se transmiten al globo terráqueo, estabilizándose y complementándose con las energías telúricas con las cuales interactúan. Por esa razón natural, existen lugares que son capaces de reaccionar normalmente bajo las radiaciones que proceden del fondo interestelar de la galaxia, aunque hay otros que no lo permiten. Estos lugares deben ser evitados, como lo hacen muchos animales antes de ir a dormir, gracias a una especie de facultad especial que poseen.
El problema radica en que los seres humanos hemos perdido esa facultad de nuestros ancestros y no queda otra alternativa que apelar a su historia, investigarlos y crear dispositivos que nos permitan detectarlos a tiempo para evadirlos o rectificarlos (1) Sigue leyendo